Tener bebés en la adolescencia puede implicar costos de salud, así como económicos y sociales para las madres y sus hijos. En los Estados Unidos ha descendido la tasa de nacimientos en adolescentes, sin embargo, en el 2013 nacieron más de 273 000 bebés de madres adolescentes de 15 a 19 años. La buena noticia es que una mayor cantidad de adolescentes está esperando antes de tener relaciones sexuales, y entre aquellas que son sexualmente activas, cerca del 90 % usó anticonceptivos la última vez que tuvo relaciones sexuales. Sin embargo, las adolescentes usan con más frecuencia condones y píldoras anticonceptivas, que cuando no se usan de manera sistemática y correcta, son menos eficaces para prevenir embarazos. Los dispositivos intrauterinos (DIU) y los implantes, que se conocen como anticonceptivos reversibles de larga duración (LARC, por sus siglas en inglés), son los tipos de anticonceptivos más eficaces en adolescentes. El uso de los LARC es seguro, no requiere que se tome una píldora cada día ni que se haga algo antes de cada relación sexual y, según el método que se use, puede prevenir el embarazo durante 3 a 10 años. Menos del 1 % de las mujeres que usan LARC quedan embarazadas dentro del primer año de uso.
¿Como prevenir el embarazado en la adolescencia?
Con el arribo de la pubertad, arriban muchas cosas para los adolescentes, entre ellas el que biológica mente
estén listos para la reproducción. Sin embargo, esta condición hormonal no es suficiente para poder emprender el camino de la paternidad
Con el arribo de la pubertad, arriban muchas cosas para los adolescentes, entre ellas el que biológica mente
estén listos para la reproducción. Sin embargo, esta condición hormonal no es suficiente para poder emprender el camino de la paternidad
Si bien es cierto, el embarazo adolescente es un problema generalizado en la población, la mala calidad de la educación sexual sumada al desconocimiento del correcto funcionamiento de los métodos anticonceptivos, eleva la cantidad de hijos de madres adolescentes en los sectores más vulnerables del país.Si a esto le sumamos la falta de servicios públicos orientados a la población más joven del país, la poca relevancia que se le da a la sexualidad responsable en las instituciones educativas y la valoración moral negativa que provoca en la población, el embarazo adolescente es vivido como un problema puertas adentro.